Tras adjudicarse la primera competencia del año, el piloto Red Bull también consiguió la victoria en la segunda cita que la máxima categoría mundial disputó el pasado domingo en Malasia. Pirelli, muy conforme con el desempeño de sus neumáticos.

El Gran Premio de Malasia, a pesar del pronóstico de lluvia, se desarrolló sobre piso seco. Sebastian Vettel supo aprovechar las condiciones de pista, y se adjudicó un nuevo triunfo consecutivo en la máxima. Jenson Button y Nick Heidfeld completaron el podio.

Pirelli también fue protagonista. Sólo tres pilotos hicieron cuatro paradas en boxes, el resto ingresó sólo en dos o tres oportunidades, como los tres pilotos del podio.

“Si pensabamos que el Gran Premio de Australia fue bueno, entonces Malasia fue algo mejor. Afortunadamente no llovió, lo que significa que hemos sido capaces de ver nuestros neumáticos sin el factor de la lluvia. Los tres pilotos del podio fueron capaces de destacar sus extraordinarios talentos, con nuestros neumáticos jugando un papel vital en las batallas que trajo la competencia final. En particular, me gustaría felicitar a Nick Heidfeld, quien fue nuestro primer tester con los neumáticos de F1”, expresó Paul Hembery, Director de Pirelli Motorsport.