En el mismo predio donde se celebra el Salón Internacional del Auto de Paris, se llevó a cabo el Salón de Retromobile 2011, la muestra que reune las más increíbles joyas automotrices de todos los tiempos. Allí, Citroen expuso algunas de sus máquinas que hicieron historia.

Desde Salta – La Estancia el “Manantial del Milagro” fue el lugar elegido por Renault para que tomemos contacto con el Duster. El lugar, con una superficie de 1.500 hectáreas rodeadas por la Cordillera de Los Andes, fue lo primero que nos sacó el aliento. Comenzamos con una charla técnica por parte del instructor Mariano Díaz Varela (foto), quien nos explicó en diferentes “ejercicios” las posibilidades de adaptación del modelo según los terrenos a enfrentar.

Nos trasladamos al circuito especialmente diseñado por la marca para que cada uno de los asistentes pudiera comprobar la versión tope de gama del vehículo. Nuestra unidad fue un Duster Privilege con motor 2.0L de 138 CV 4×4.

Lo primero para destacar es el gran despeje del suelo, con ángulos de ataque y salida que le dan verdaderas capacidades off-road. Ya sea en pendientes pronunciadas, en velocidad, sobre piedras o hasta participando de un rescate, el vehículo se desplazó de manera segura y efectiva como resultado del equilibrio logrado entre los aspectos ya mencionados y el reglaje de la suspensión.

Por una cuestión de “obstáculos naturales” nos vimos obligados a avanzar como máximo en 2º marcha ya que nos enfrentamos a todo tipo de terrenos, ripio, pendientes y hasta vadeando cursos de agua. En nuestro caso, el Duster cargaba a 3 pasajeros (2 periodistas y un instructor) y de más está decir que pudimos conectar todas posibilidades de tracción: 4×2 y 4×4 en sus opciones On Demand y Lock.

En cuanto al habitáculo podemos afirmar que es espacioso, tanto para conductor y acompañante como para las plazas traseras. Deslizando hasta la máxima posición hacia atrás las butacas delanteras, los ocupantes de las plazas posterior no alteran su confort. Pasando a los detalles, el diseño de los gráficos es simple, los comandos están bien distribuidos, todo al alcance de la mano. Algo que falta: los espejos de cortesía no tienen luz.

El diseño en general es muy bueno, con materiales de buena calidad. El volante es fácil de llevar, permitiendo hacer maniobras rápidas con buena reacción. Docilidad es sin duda la palabra adecuada para describirlo.

Lo concreto es que dinámicamente el nuevo Duster colma todas nuestras expectativas con respecto al circuito off-road, nos resta ver su comportamiento en ciudad, donde posiblemente un gran porcentaje de usuarios lo use aún más. Seguramente una prueba más completa revelará más detalles de la nueva apuesta de Renault.