El Start de Ford es un modelo compacto, moderno y muy liviano. Se especula con que sus líneas serán las que adoptarán las próximas generaciones del Ka, aunque no hay precisiones sobre una fecha para entrada en producción.
Por lo pronto sólo se sabe que tendrá una motorización Ecoboost (de la familia que estrena el nuevo Mondeo) de tres cilindros y 1,2 L con 92 CV de potencia.

El FT-EV (Future Toyota – Electric Vehicle) en tanto, plantea cómo será “el próximo paso” de la japonesa en vehículos con “emisiones cero”, alimentados a batería de Litio-Ion.
Según describen, puede alcanzar una velocidad máxima de 110 km/h gracias a su peso reducido, y será un vehículo “ideal para un usuario urbano que conduce 80 km. entre su casa y el trabajo”. Es decir, está pensado para una autonomía limitada, tal como son los actuales modelos eléctricos que comienzan a fabricarse en serie, como el Nissan Leaf, que tiene una autonomía declarada de 170 kilómetros.
El prototipo fue desarrollado sobre la plataforma del Toyota iQ, el compacto para cuatro pasajeros que ya es un éxito de ventas en Japón y Europa, ofreciendo una “excelente performance, detalles refinados y un aspecto joven y entretenido”.