Analizamos el acceso a la cabina del nuevo Ford Fiesta Kinetic Design y el espacio que provee en sus cinco plazas.

El Fiesta Kinetic Design ofrece un buen acceso en sus plazas delanteras mediante grandes puertas con amplio grado de apertura. La boca liberada es importante y solo hay que agacharse un poco debido a la baja altura de butaca.

Siendo un compacto, no hay espacio de sobra y esto se siente en las puertas traseras, que han cedido tamaño a las delanteras. Esto se hace más notorio en la parte baja, donde interfieren los guardabarros; en la zona superior, la boca de acceso es larga facilita, marginalmente, el acceso.

El baúl ofrece una boca grande, el plano de carga es bajo y el portón queda lo suficientemente alto como para no tener que agacharse demás a la hora de cargar y descargar. El capot no marca acceso a la cabina, pero si a los componentes mecánicos, con una boca grande que se extiende hasta el borde de los faros.

En cuanto a espacio, las plazas traseras ofrecen todo el deseado, tanto para piernas como hombros y cabeza. En el banco posterior las cosas se compactan, especialmente para las cabezas. Sin sobrantes, las piernas podrán encontrar suficiente espacio hasta, al menos para ocupantes de 1.75 m sentados en tándem.

Debido a la alta línea de cintura, en el asiento posterior el ambiente es algo claustrofóbico, sensación parcialmente solucionada por las pequeñas ventanillas posteriores. El espacio a lo ancho alcanza para dos adultos a los que se puede sumar un niño. Colocando una silla de bebe y un chico , igualmente hay espacio para llevar también un mayo, que podrá viajar cómodamente, si el viaje no es demasiado largo.