El gobierno de Dilma Rousseff prepara un plan de premios y castigos a la industria automotriz, para aumentar el porcentaje de partes e insumos con origen en ese país. A través de una serie de requisitos y la asignación de puntos proporcionales, las terminales brasileñas podrían tener importantes reducciones en la alícuota del Impuesto sobre Productos Industrializados (IPI) que desde el año pasado se fijó en 37% del valor neto.
El nuevo régimen apunta a fortalecer la producción y la integración local, al tiempo que estimula la inversión en investigación y desarrollo de nuevos productos, y la eficiencia en el consumo de combustible, ya que todos estos son ítems que también sumarán al puntaje final.
Si bien no se dará marcha atrás con la suba de 30 puntos porcentuales que tuvo el IPI el año pasado, las automotrices que obtengan determinado número de puntos recibirán reducciones progresivas en la alícuota a pagar. Para cada rubro existirá una escala determinada, por ejemplo, las inversiones en ciencia y tecnología comenzarán a valer puntos a partir del 1% de la facturación de la empresa, mientras que lo que se destine a aumentar el contenido nacional tendrá un peso mayor.
Según señala un artículo publicado en el diario brasileño Valor, el detalle de las nuevas reglas será anunciado por la presidenta Dilma Rousseff en los próximos días, después de que ajusten los detalles entre los ministerios de Hacienda, Desarrollo y Ciencia y Tecnología, que intervienen en el diseño. De acuerdo a lo que adelantaron, el sistema es sofisticado y compatible con las reglas multilaterales de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La recaudación del IPI sobre automóviles sumó el año pasado 7.150 millones de reales, lo que representa 0,72% de la recaudación global del Fisco y 14,9% del total cobrado por ese impuesto.
Además del anuncio de este nuevo programa, que tendría una vigencia de 3 años a partir del 2013, se estima que el gobierno brasileño también podría anunciar incentivos a la producción de autos eléctricos en el país, aunque aún existen opiniones divididas sobre el tema.