El ritmo de crecimiento que tuvo la demanda de autos en los últimos 12 meses, difícilmente pueda ser igualado (y menos aún, superado) en los años venideros. El ciclo positivo se extendió durante 25 meses consecutivos, hasta diciembre pasado, cuando la comparación con el mismo mes del año 2010 mostró un leve descenso de 0,6%.
Las ventas de 2011 superaron todas las previsiones: se patentaron exactamente 857.983 unidades, aún a pesar de algunas demoras en las entregas y de las distorsiones en la oferta generadas por las trabas a los importados por parte del gobierno. Con ello, el crecimiento de los 12 meses de 2011 fue de 29,5% comparado al total de 2010, año en el que ya se había marcado un record absoluto, con 662.600 unidades vendidas.
| Patentamientos | 2011 | 2010 |
| Enero | 104.107 | 78.466 |
| Febrero | 60.178 | 44.760 |
| Marzo | 67.605 | 57.287 |
| Abril | 65.373 | 50.946 |
| Mayo | 67.986 | 50.820 |
| Junio | 78.517 | 54.810 |
| Julio | 73.041 | 57.571 |
| Agosto | 79.971 | 57.402 |
| Septiembre | 84.238 | 64.051 |
| Octubre | 72.068 | 53.828 |
| Noviembre | 65.292 | 54.042 |
| Diciembre | 38.739 | 38.762 |
| TOTAL AÑO | 857.983 | 662.741 |
| Fuente: ACARA | (+29,5%) | – |
En el análisis de los patentamientos por empresa, Volkswagen retuvo el podio, con una diferencia importante respecto de Chevrolet, en la 2º posición y seguida por Ford.
Las cifras de la industria, en tanto, también presentaron signo positivo aunque con porcentajes más moderados, habida cuenta que el nivel de producción durante 2010 había sido aún superior al de ventas. En el acumulado de los 12 meses de 2011 se contabilizaron 828.771 unidades fabricadas por el conjunto de las 11 terminales agrupadas en la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), lo que representó un incremento de 15,7 % en relación al acumulado de 2010.
| Producción | 2011 | 2010 |
| Enero | 47.000 | 31.602 |
| Febrero | 42.051 | 40.106 |
| Marzo | 70.487 | 52.669 |
| Abril | 72.432 | 57.120 |
| Mayo | 79.585 | 59.723 |
| Junio | 80.795 | 65.256 |
| Julio | 70.628 | 57.596 |
| Agosto | 84.655 | 71.781 |
| Septiembre | 79.977 | 73.323 |
| Octubre | 73.237 | 65.878 |
| Noviembre | 75.564 | 75.529 |
| Diciembre | 52.412 | 65.957 |
| TOTAL AÑO | 828.771 | 716.540 |
| Fuente: ADEFA |
(+15,07%) | – |
Entre esas 11 se cuenta a la flamante planta terminal de la japonesa Honda, en cercanías de Campana, que comenzó la producción en serie de un único modelo (el sedán compacto City) hacia mitad de año, aunque con un volumen aún muy acotado y no pocas dificultades de abastecimiento de piezas, a causa del tsunami en Japón en marzo de 2011, y las inundaciones en Tailandia en el mes siguiente.
| Empresa | 2011 | 2010 |
| PSA Peugeot Citroën | 143.898 | 126.968 |
| General Motors Argentina | 136.428 | 127.818 |
| Volkswagen Argentina | 125.438 | 87.073 |
| Fiat Argentina | 113.468 | 96.059 |
| Renault Argentina | 111.492 | 91.222 |
| Ford Argentina | 103.883 | 96.454 |
| Toyota Argentina | 68.929 | 70.032 |
| Mercedes-Benz Arg | 18.505 | 16.461 |
| Iveco Argentina | 5.851 | 4.453 |
| Honda Motor Argentina | 879 | 0 |
| TOTAL AÑO: | 828.771 | 716.540 |
Mercados externos vs. Demanda doméstica
En el rubro exportaciones, la variación respecto al año pasado se mantuvo en un promedio de crecimiento por encima de 10%, aunque en septiembre se produjo la primera señal de alarma por la “desaceleración” de la demanda de Brasil.
Fue la primera caída del año, con ventas totales al exterior de 44.348 unidades, 11,4% menos que el mismo mes del 2010; luego pasaría lo mismo en noviembre (-17,8%) y diciembre (-11,4%).
| Exportaciones | 2011 | 2010 |
| Enero | 36.444 | 19.474 |
| Febrero | 25.091 | 23.205 |
| Marzo | 38.994 | 32.765 |
| Abril | 42.244 | 32.387 |
| Mayo | 52.715 | 38.900 |
| Junio | 46.737 | 40.813 |
| Julio | 46.248 | 36.988 |
| Agosto | 54.955 | 42.526 |
| Septiembre | 44.348 | 50.071 |
| Octubre | 42.455 | 40.938 |
| Noviembre | 40.901 | 49.740 |
| Diciembre | 35.583 | 40.146 |
| TOTAL AÑO | 506.715 | 447.953 |
| Fuente: ADEFA |
(+13,1%) | – |
De lo anterior se desprende que la demanda interna fue el principal factor impulsor, dentro de un panorama en general positivo del sector automotriz. Potenciada por un índice de inflación “real” muy por encima del “oficial-Indec” que genera una aceleración del consumo de bienes de capital, la fuerte demanda de 0 km también se explica por la existencia de un parque automotor que todavía tiene un promedio de antigüedad muy elevado, y a pesar de una incidencia todavía baja de los distintos instrumentos financieros como mecanismos de compra.
Tal como señalamos más arriba, las ventas en el mercado interno no reflejaron los problemas que enfrentaron las marcas importadoras frente a la exigencia del gobierno de compensar “uno a uno” las divisas salientes con entrantes, a través de exportaciones.
En este sentido, quedó demostrado que la demanda es flexible y ante la ausencia de un modelo o marca determinada, migra hacia la oferta de la competencia. Los más perjudicados, lógicamente, fueron los que tardaron más tiempo en “arreglar”, como el caso de BMW Argentina, que recién llegó a un acuerdo con el Ministerio de Industria en octubre y sus ventas en los primeros 9 meses cayeron 44 por ciento (lo mismo con su otra marca controlada, la inglesa MINI, con -39%).
Otras marcas importadas también se vieron afectadas y virtualmente desaparecieron del mercado argentino, aunque por una variedad de razones: como la española Seat, que no se comercializa más por una decisión comercial de su grupo controlante Volkswagen. La japonesa Suzuki dejó de tener representante local al terminar su vínculo global con General Motors. Además, marcas súper exclusivas como Rolls Royce, Ferrari o Maserati, que tienen una fuerte presencia en el imaginario público, no tuvieron operaciones.
Nubarrones
Pero más allá del furor por el nuevo récord de demanda que colocó al país por encima de mercados más voluminosos como México o España, el “año récord” comenzó a verse empañado a medida que llegaban malas noticias de las finanzas europeas y sus consecuencias en otras regiones como el Mercosur.
Los mayores nubarrones comenzaron a aparecer en el horizonte de las terminales locales a partir de septiembre, cuando los efectos de la crisis internacional comenzaron a impactar en la mayor economía de la región – Brasil – y destino por excelencia de los envíos argentinos, con una participación de 81,2%.
En ese mes se produjo la primera caída en relación al año anterior, con 44.348 unidades despachadas, 11,4% menos que el mismo mes del 2010. En octubre las ventas al exterior estuvieron equiparadas (+3.7%) pero en noviembre volvieron a caer un significativo 17,8%.
En ese contexto, las plantas cordobesas de Fiat y Renault, que como todas, destinan el grueso de su producción al mercado vecino tuvieron sendos “amagues” de reducción en el ritmo de producción en los primeros días de octubre. En ambos casos, a causa de un aparente sobre-stock de las concesionarias en ese país, o bien por una acumulación de despachos en los depósitos aduaneros, a la espera de la entrega de licencias que desde comienzos de año pasaron a ser “no automáticas”.
Este factor se ubicó como uno de los más preocupantes para los industriales argentinos. “La industria automotriz de Brasil depende de la industria Argentina y viceversa, por lo que a ninguno de los dos países le conviene que las trabas comerciales impuestas se extiendan en el tiempo”, afirmaba en diciembre Sergio Rocha, presidente de GM Argentina. “Confiamos que los gobiernos de ambos países encontrarán una salida a este tema que afecta a toda la industria por igual”, agregó con buena dosis de optimismo.
Más duro, Cristiano Rattazzi, Presidente de Fiat Auto Argentina afirmaba que las trabas “complican mucho la operatoria”. “Ciertas limitaciones de la cadena de proveedores para acompañar el aumento de producción simultánea en Brasil y Argentina; las dificultades operativas resultantes de medidas para-arancelarias y obviamente la menor rentabilidad resultante de la pérdida de competitividad”, fueron las principales dificultades del sector en 2011, enumeró.