El presidente de General Motors para la región sudamericana, Jaime Ardila planteó la preocupación de la automotriz por las disputas comerciales entre los gobiernos de Brasil, Argentina y México, y lo que considera “un rebrote de proteccionismo” en las políticas de comercio exterior. Estos son factores que podrían complicar las inversiones en el sector automotor, indicó tras adelantar un planteo a los representantes de estos países exigiendo “reglas de juego claras”.
Las consideraciones de la máxima autoridad de la automotriz norteamericana en la zona Latinoamericana fueron difundidas ayer en el marco de una reunión de empresarios paralela a la Cumbre de las Américas que se realizó en Cartagena de Indias, Colombia.
“No nos gusta que nos cambien las reglas de juego a cada rato, sin aviso”, indicó Ardila, tras reconocer que los planes de inversión de la compañía en Brasil, México y Argentina podrían verse alterados.
“Nosotros ya habíamos hecho planes de inversión en México, también en Brasil y en la Argentina, basados en esos acuerdos. En la medida en que se cambian por esta situación proteccionista, nos impacta”, señaló el ejecutivo a la agencia Reuters.
Cabe recordar que en marzo pasado Brasil impuso un límite a las importaciones de autos desde México, forzando a que este último limite hasta un cupo de u$s 1.400 millones el valor de los envíos anuales de este sector.
Apoyado en ese antecedente, Argentina también busca renegociar el acuerdo automotor que mantiene con México que acusa de haber generado un déficit de poco menos de u$s 1.000 millones en 2011.
El ejecutivo consideró que estos cambios en los acuerdos comerciales son “forzados” y se quejó de que no están dando tiempo suficiente a las empresas para adaptarse. En este sentido, llevó a la Cumbre de presidentes un pedido por “reglas de juego más estables” que abran las puertas para mayores inversiones.